Para quien sabe engañarse, el tiempo es un aliado.
Para quien no sabe, es un tormento.
Para quien cree vivir, la distancia entre si mismo y la vida es infinita e irrelevante.
Para quien quiere vivir, esa distancia es inapreciable e insalvable.
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5 comentarios:
Yo no creo que la vida sea sueño, Teresa. Más bien que el sueño es vida (o una manera de acortar distancias con la vida).
Bueno, yo a veces he creido que vivo un sueño...una segunda oportunidad y que cada día que pasa se acerca al final como una película a la que aun no le has puesto el punto crítico que se espera...no existe aun el personaje para volverla válida.
Es un tormento sí, pero delicioso escribirse a sí mismo cada día.
no se como has hecho pero cada frase tuya tiene sentido y olor a verdadero. no esta prohibido eso?
Me ha gustado mucho eso de la película sin personaje, Laura.
Aunque mis expresiones sean categóricas, Teresa, sólo pretenden ser una aproximación a mi interpretación de algún resplandor que he visto en una noche oscura. Posiblemente creamos parecido. ¿Lo mismo?. No quisiera pensar lo mismo que nadie.
No, Eleafar, no está prohibido, sólo desprestigiado.
Jajaja
Seguro, Teresa, que con un buen plato de queso de Tronchón y un par de botellicas de... (el vino lo eliges tú), las palabras "vida" y "sueño" nos encajarían perfectamente.
Besos
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