La distancia a nuestros sueños no se puede recorrer.
Caminamos hacia ellos, en el vano intento de alcanzarlos, pero sólo conseguimos alejarlos.
Tal vez, empujar un poco más allá nuestros sueños, sea el verdadero sentido de nuestro caminar.
Para así, siguiendo su estela, avanzar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
... tal vez...
Soñar nos da libertad para ser nosotros mismos... Para dejar volar nuestra imaginación sin límite, sin censura, sin vergüenza, sin miedo... Ojalá pudieramos dejar de soñar sólo cuando nosotros lo decidiéramos.
Un saludo! ;)
Nunca dejamos de soñar, incluso cuando creemos que no soñamos. Lo que yo pienso es que nos encanta parcelar.
Esa idea es un sueño o niet?
no sé Nacho, ojalá fuera tan extendida la capacidad de soñar
la planteaba ya Calderón de La Barca...
Publicar un comentario