Repartir sonrisas entre desconocidos puede desembocar en algún malentendido. Pero como no me apetece guardar mis sonrisas en la recámara, las prodigo entre quienes supongo capaces de responder sin cuestionarse mis motivos, es decir, los menores de cinco años.
PD. Sé que hay madres que piensan que sonrío a sus niños para ligar con ellas.
martes, febrero 21, 2006
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7 comentarios:
que guay! se irán super contentas y los criotes pensando ¡anda la mama que creida...!
aguanta unos meses con esa constumbre, porfa, que me encantara cruzarme contigo
jajaja, nooo, no dejes nunca de sonreir! normalmente la gente se muestra mucho mas agradable si vas con una sonrisa en la boca...
me ha encantado tu blog, Nacho!
un abrazo!
Espero aguantar hasta el final, Beclen.
Bienvenida Susana a este blog. Me alegra que te gustara.
Sonrisas para ambas.
Gratas incursiones a tu nlog, Nacho que invitan a sonreír, sin que sean nenes :)
Muchas sonrisas, Vir.
Eso es bueno, así tus sonrisas harán un magnífico efecto en ambos; yo sólo sonrío a los perros, con la esperanza de ligar con sus dueñas, y a veces les digo: "Bonita dueña perrito, ¿cómo se llama?
Omar. Yo es que no mantengo relaciones con perros. Saludos.
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