miércoles, febrero 15, 2006

... que van a dar en el mar

No sé si mis pasos siguen a mis sueños o son éstos los que van tras aquéllos. Sólo sé que cada día, sin proponerlo y como si necesitara cumplir el clásico designio poético: "nuestras vidas son los ríos", me acerco al Ebro.

Sea como fuere, camino junto al cauce, contracorriente, saludando y despidiendo al instante de agua que se me ofrece.

Y sueño que acabaré mis días sumergido, buceando lejos de la superficie, en la misma entraña de la vida,... de donde vengo.

3 comentarios:

nacho dijo...

Ami me encanta todo a la contra, aunque procuro que no se note.
Un beso, Teresa.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Será como ver el agua fluir tan pronto como los pensamientos se van...


ah, una se poner a soñar, y cuando se olvida de hablar como dos personas que se encuentran cara a cara, aparece algo de seriedad y a mí la seriedad se me filtra y prefiero partir... son cosas mías...

la disquisición nació a partir de tu post... me voy..

perdona el tono perdido.

nacho dijo...

Me encantan los tonos perdidos, Vir.