Propongo a aquellos que se suicidan después de matar a alguien que, por favor, lo hagan al revés. Que se suiciden primero.
Y no les voy a exponer las razones de mi propuesta porque es obvio que la razón no es algo que les toque muy de cerca. Además, para qué hacerles perder el poco tiempo que les queda de "vida" con argumentos.
Y no se preocupen, que en una próxima vida, si tienen a bien reencarnarse en un ser racional, yo personalmente les explicaré todas las razones de mi propuesta.
De momento, dedíquense unicamente a seguir mis instrucciones. Sabemos de sobra que no les da para más.
jueves, enero 12, 2006
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5 comentarios:
OOoohhh, esta insólita propuesta dejaría pensativo al viejo Emile...
:)
de cajón, la cosa es de cajón.
saludos
Vir, yo me conformo con que dejara pensativo a alguien. Pensativo para siempre.
Así lo veo yo también, Beclen, de cajón.
Besos.
Que el suicida se regenere con un vuelo antes de hacer nada "externo"...
En el fondo no es sino su último acto de cobardía y mezquindad
Saludos
Tienes razón Max, pero yo me quedo con estos versos de Jaime Sabines: "Cuando tengas ganas de morirte,
no alborotes tanto: muerete y ya."
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