lunes, enero 26, 2009

Último café

Hoy he tomado mi último café, mi café de despedida, con una persona querida.

Ha estado bien porque ninguno hemos llorado, porque ninguno hemos creído que realmente era el útlimo.

Posiblemente habrá otro, aunque puede que no. Y ante la incertidumbre ¿por qué optar siempre porque ese no es el último? Alguna vez lo será.

A mi me ha sabido muy bien este "último café".

Y me sabrá mejor si hay otro más allá del último. Será un regalo del destino.

4 comentarios:

Antón Abad dijo...

El destino es muy cafetero Nacho, de hecho hoy nos hemos tomado un café por la mañana y hablamos de Ud.; me dijo que le tiene preparado uno, y con pastas de otra tierra. Siga tomando café, para recordar este día pensando en el próximo; y si alguna vez le llora un ojo tras el primer sorbo, retire la cucharita.

nacho dijo...

¿Con pastas de otra tierra? Entonces seguro que no es hoy, porque hoy toca roscón de San Valero, de aqui mismico, de Zaragoza.

Sigue pendiente un café en el Chiado, Antón, aunque sea el siguiente al íltimo.

Antón Abad dijo...

¿De verdad que se ha pasado al ominoso té?
Pues cuando se tome uno con Tere, dígale que la extraño.

nacho dijo...

Seguiré tomando café, Antón. Y si puedo, atenderé sus peticiones.