Adivino tu huella en los restos polvorientos de un baile de máscaras.
Tu sonrisa perdura en el aire, matizando los antifaces. Como si te despidieras.
Pero nunca te vas, porque al igual que los amores, vuelves sin volver y te marchas sin irte.
viernes, febrero 09, 2007
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3 comentarios:
Querido amigo, he pasado un buen rato disfrutando de sus sueños, microcuentos y reflexiones. Creo que será mi próxima estrategia, abandonarle de tanto en tanto; garantizaré de ese modo el placer continuado de hoy.
Vale, Luzbel. Dejaré la llave bajo el felpudo.
Esa manera de soñar... o esa amnera de vivir.
:) salute estival.
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