Despiertos en la noche clara de nuestras mentes, esperamos una solución para poder dormir, para llegar al sueño por uno de los muchos caminos, - químicos, físicos o metafísicos -, que existen.
Soñé que entraba en un sueño por un puente de nácar, sobre un río caliente de agua y vapor.
Me pregunté por el camino seguido para llegar hasta allí. Me pregunté y me pregunté, y tanta pregunta me retornó a la noche clara de mi mente, a esa lucidez en medio de tanta respuesta, en la que no comprendo nada.
De inmediato, el vértigo de la incomprensión me devolvió al puente, a la entrada del sueño, sobre el río caliente de agua y vapor.
Dudé entre avanzar hasta el sueño y abrir los ojos, pero me quedé atascado en el umbral, semidormido.
Y fue entonces, paralizado sobre el puente, cuando vi a la mujer de mis sueños salir del agua. Desnuda. Alejándose.
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7 comentarios:
La próxima meta eel dedo gordo del pié para ver que tan caliente está y dese prisa en pos de la mujer, con un poco de suerte no la alcanza.
¿Me puede mandar la "e" sobrante?, es que el contable luego se pone pesado, para mí que trama algo ese, puede que esté negociando una OPA a mis espaldas.
una belleza, ese puente e imagino que la mujer desnuda, se veía divina.
Belleza de imágenes querido Nacho.
Que la suerte sea también contigo.
Debo ser afortunado, Luzbel, pues no la alcanzo. Le mando la "e" por correo certificado.
Se veía divina, Vir. Demasiado divina para un sueño.
Te veo (y te leo) luego en mis sueños, Laura.
una vez logre alcanzar a esa mujer de los sueños. cuando me acerque a besarla me senti el aliento, nacho! de verdad fue un sueño. desperte perturbado.
cosas de los sueños nacho, cosas de los sueños...
Yo ni lo intento, Eleafar.
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