lunes, diciembre 27, 2010

Cosmogonía de Uno

La luz imposible de aquel sueño construyó el paréntesis de posibilidades en el que poder escribir. Las letras fueron cayendo, una a una, como sombras. Las palabras se alumbraron en siluetas. Atisbé a contraluz que Uno (vuelvo a evocar a Discépolo) lo es despertándose en su sueño o no es. Dicho en palabras de Pessoa: "Duermo cuando sueño lo que no existe. Me despierto cuando sueño lo que puede existir"

3 comentarios:

Lúzbel Guerrero dijo...

Discepolín era en verdad bueno; pero no me lo ponga a la misma altura que a DON FERNANDO, que me cabreo
Es que vengo calentito de escuchar al ministro Sebastián
Un fuerte abrazo querido amigo, ahora que aún podemos tenernos en pie

Laura Martillo dijo...

A mi me gustó...claro que me gustó...aunque no entendí las referencias,
ya sabes lo de ingenua no es en vano.
Un buen cambio de año querido,
un buen sueño para ambos!

nacho dijo...

Descabreesé (¿se escribe así?), Lúzbel, total por un café...
En lo que a mi respecta, no pretendo hacer comparaciones. Además, mis sueños los pueblan enanos y gigantes. Un abrazo.

Hola Laura. Lo de ingenua no me lo creo ni borracho (siempre me pareciste genua y geniosa) y las referencias no tienen mayor importancia. Para mi son sólo excusas para alimentar sueños. ¡Que sigas disfrutando de ti en el 2011!