lunes, mayo 03, 2010

Transfusión

Me quedé sin tinta
de tanto escribir lo viejo.
Recargué la pluma con mi sangre
y escribí lo nuevo.

"Que el mundo es y será una porquería, ya lo sé"

4 comentarios:

Laura Martillo dijo...

Querido! Y para eso necesitabas sangre tuya? Lo hubieras susurrado al viento no más...Que las verdades siempre llegan

nacho dijo...

Laura! No puedo estar más de acuerdo contigo (pregúntale, si no, al viento por mis susurros). Pero este blog subsiste por los restos de romanticismo y cierto tipo de compromiso que todavía recorren mis venas. Un beso.

Maribel-bel dijo...

La sangre no es como la tinta,que se compra y se cambia. La sangre duele, amigo mío. Biquiños.

nacho dijo...

Y lo nuevo también duele, Maribel-bel. Besos.