viernes, mayo 02, 2008

Carta de un regalo a otro

Desde hace mucho, tal vez siempre, he pensado que los humanos somos regalos, los unos para los otros y siempre, esta vez sí, siempre, he sentido que yo era un regalo especial para ti y tú un regalo especial para mi.

Pero (siempre hay un pero, claro, siempre, esta vez también, siempre), y como canta Silvio Rodríguez, “aparecieron cosas de este mundo” y volvimos a confundir el SER con el HACER y el ESTAR.

Ahora que mi alma se ha ido de mi para acurrucarse contigo para toda la eternidad, que a cada rato tengo que ir a buscarla para que no me acabe olvidando, te digo que no te necesito.

Nunca necesité un regalo en especial. Siempre necesitaré regalos especiales.

Y no quiero hablar de amor porque hablar de amor es de cobardes.

2 comentarios:

Teresa dijo...

perder el ser, confundir, las "cosas de este mundo" también forman parte del regalo...

besos

Abel Granda dijo...

Completamente de acuerdo con Ud, somos regalos los unos para los otros, y hay días en que parece que nuestro cumpleaños, se repite avaricioso.
Para mí ha sido un regalo conocerle, porque cuando vino, abierto, pude confirmar que nunca había habido envoltorio.
Hablar de amor no es de cobardes, es de escaqueados.